A PESAR DE LAS DIFICULTADES, EL ALIVIO Y EL APOYO PERSISTEN
Dos meses de violencia étnica y desplazamiento masivo han devastado a la comunidad Bnei Menashe en Manipur, en el noreste de la India, y han puesto una gran presión sobre los esfuerzos de socorro, pero estamos haciendo todo lo que podemos.
Un total de 292 familias Bnei Menashe (que suman 1.190 hombres, mujeres y niños) se han visto obligadas a huir de sus hogares desde que comenzó la violencia entre las tribus Meitei y Kuki y la mayoría de ellas se han quedado sin hogar y sin nada.
Seguimos estando profundamente preocupados y estamos haciendo todo lo posible para satisfacer sus necesidades y aliviar este momento difícil. Ahora ha comenzado la temporada de monzones, lo que trae la propagación de enfermedades y el empeoramiento de las condiciones para los refugiados.
Hay mujeres y niños que sufren de enfermedades, como Rivka, una joven de la comunidad de Sajal, que tuvo que ser hospitalizada. Shavei Israel la ha estado cuidando, bien como a los otros refugiados, proporcionándoles médicos, medicinas y servicios de salud en hospitales a todos los que lo necesitan.
Hemos estado trabajando literalmente las 24 horas del día para cuidar las condiciones de seguridad, físicas, espirituales y de salud de los refugiados en los cuatro campos de refugiados de Shavei Israel, tres en Manipur: Kangpokpi, Moreh y Churachandpur, y otro en Aizawl, Mizoram.
En Aizawl, Mizoram, se encuentra Meir Phaltuel, un emisario de Shavei Israel, que viajó especialmente en una misión que implica peligro debido a la guerra, para apoyar a la comunidad. Está con los miembros de la comunidad y los refugiados que vinieron de diferentes lugares, enseñándoles judaísmo, y se asegura de que los recursos que Shavei Israel transfiere a los refugiados lleguen a su destino de la manera más eficiente.
En los últimos días se han renovado los tiroteos en varios lugares de Manipur, y los Kukis no están interesados en la ayuda o compensación del gobierno. Bajaron las barricadas de la carretera principal, quemaron una de las casas de los líderes de la tribu de Churachandpur, y los Kukis están empezando a luchar activamente.
El gobierno indio no dará visas a los estadounidenses para que entren a ayudar. Hay una organización de las Naciones Unidas y tampoco les permiten entrar en Manipur; los Meiteis no permiten que las personas entren en las fronteras del país, solo sus aliados.
En Moreh, el toque de queda continúa, la situación es estática.
En Kangpokpi hay una obligación para los hombres adultos de entrar al ejército. A las familias no se les permite salir de sus hogares, y a aquellos que lo hacen les quitan todas sus posesiones, que quedan para la organización que controla el área.
Estamos haciendo todo lo que podemos. ¡Usted también puede ayudar! Por favor, haga su generosa donación a: Fondo de ayuda de emergencia Bnei Menashe.
A pesar de que continúan los bloqueos de Internet, hemos podido acceder a algunas imágenes: